El pasado domingo 29 de septiembre ha sido enviada la parroquia a la Misión de la Iglesia. Tras el paréntesis del verano, las cosas vuelven a la normalidad y hay mucho que regar y mucho que sanar. El Hombre, el Mundo, están heridos esperando una mano amiga que los saque de su indigencia... Esa mano es la de Cristo, que se hace real y tangible en las manos de los Cristianos, en las manos de la Iglesia. Son manos para bendecir y para acoger... a los niños, a los casaderos, a los ancianos, a los jóvenes, a los alejados y a los cercanos....
Lo que buscamos con el envío es tomar conciencia de que la iglesia es misionera, no de sí misa sino de la Palabra de Dios que es Cristo, de su acción Salvadora y de su fuerza que transforma y contagia las vidas. Por eso, nos pusimos manos a la obra a organizar todas las acciones de la parroquia pero sobre todo, empezamos por donde se empieza la casa de Dios, con un retiro donde se habló poco entre nosotros y mucho entre Dios Eucaristía y nosotros, sus siervos pobres.
Os invitamos no a dejar estos retiros para que crezca a lo alto y a lo ancho nuestra parroquia.
No hay comentarios :
Publicar un comentario